ANSIEDAD, MIEDOS

ANSIEDAD, MIEDOS, Centro Óptima

ANSIEDAD, MIEDOS

La ansiedad es una vivencia muy personal (cada persona la vive de forma diversa y heterogénea) y con expresiones somáticas como taquicardia, nauseas, dolores de cabeza, temblores, ganas de comer más o no tener apetito, dormir mucho o no poder conciliar el sueño….

Pero a la vez hay expresiones que incluso vamos normalizando y que también nos indican que llevamos un ritmo estresante, que necesitamos parar y ver cómo va nuestra vida: intentar cubrir las expectativas que otras personas tienen de nosotros, pensar que nunca es suficiente, los “no puedo”, “estoy cansada”, dificultad para tomar decisiones, criticarme en exceso, no verme bien físicamente ni con la ropa que nos ponemos, tener pensamientos catastróficos, ser muy perfeccionista, querer controlarlo todo… ¿Es familiar para ti?

Desde la psicología la ansiedad es motivo de consulta cada vez más frecuente, y es que la ansiedad generalmente lleva asociado un miedo. En el DSM-5 encontramos diferentes tipos de trastornos de ansiedad:

-Trastorno de ansiedad por separación: cuando el miedo se produce a la separación de aquellas personas con las que se tiene una relación de apego, como los padres.

-Trastorno de ansiedad generalizada: sería como una preocupación o miedo en ausencia de un objeto claro o concreto.

-Mutismo selectivo: consiste en un miedo a hablar en situaciones sociales específicas.

-Ataques de pánico: suelen aparecer repentinos y con una sintomatología física muy fuertes, aquí el miedo iría dirigido a esas sensaciones físicas. En estos casos se suele acompañar con la evitación de sitios y lugares donde sea difícil de escapar, como un autobús, un ascensor…

-Trastorno de ansiedad social (fobia social): el miedo va dirigido a la exposición de situaciones sociales cotidianas.

-Fobia específica: el objeto de miedo es personalizado, podemos tener fobia a las arañas, a la altura, a las inyecciones, a montar en avión…

 

Visto así, parece que la ansiedad es “mala” o “no queremos tenerla”, pero la verdad es que la ansiedad es una respuesta de alerta ante un peligro. Denominamos ansiedad a un proceso complejo por constar de síntomas que se entremezclan y que podemos clasificarlos en 4 áreas:

-área física: como sensaciones del cuerpo, lumbalgias, dolor de cuello, mareos, problemas intestinales…

-área cognitiva: pensamientos sobre un futuro que se presenta “negro”, preocupaciones constantes sobre acontecimientos que no ocurrirán, pensamientos que llamamos catastrofistas (son aquellos en los que contemplamos el peor escenario sobre una situación).

-área emocional: la ansiedad va unida principalmente a la emoción de miedo.

-área conductual: las 3 áreas anteriores nos lleva a querer evitar todo lo que sea posible y necesario para no sufrir esos síntomas que evaluamos como desagradables e incapacitantes.

¿Y todo esto como se relaciona, cómo ocurre?

El mecanismo de la ansiedad se desarrollaría de la siguiente manera: comenzamos teniendo un pensamiento con un contenido sobre un tema, vivencia o situación que PODRÍA PASAR pero que NO ESTA PASANDO AHORA MISMO

De ello se deriva que comencemos a tener una experiencia interna que vivimos como desagradable, incómoda, dolorosa y que nos da miedo (taquicardia, ganas de vomitar, no poder tragar, pensar que no puedo controlarlo, no saber que me está ocurriendo, miedo a morirme…) por lo que respondemos con evitación experiencial (por todos los medios pretendemos evitar que ese malestar vuelva a aparecer o a repetirse).

Además, la ansiedad hace que tengamos una atención selectiva, que quiere decir que somos más sensibles a cualquier situación, experiencia o persona que pueda provocarnos esas reacciones de miedo y malestar. Así que empiezo a tener un sesgo interpretativo, estímulos neutros para mí, que soy una persona con ansiedad se van a convertir en amenazantes. Ya tenemos el círculo de la ansiedad que cada vez irá agrandándose y que nos limitará mucho más en nuestra vida y cómo la vivimos.

Pero como os decía la ansiedad es una respuesta adaptativa aunque esa respuesta se activa en momentos que no son necesarios, por lo que requiere de tratamiento psicológico. Necesitamos en vez de evitarla, aceptarla y desde la curiosidad y la colaboración averiguar ¿Para qué aparece la ansiedad? Sé que es muy difícil lidiar, vivir y gestionar la ansiedad y que también sea difícil de entender para otras personas que quizás nunca hayan tenido o sí, pero no con tanta magnitud.

Aceptar ese miedo y esa incertidumbre es complicado, pero forma parte de la existencia humana, es parte de nuestra protección, de nuestro autocuidado,  nuestra responsabilidad de cómo nos adaptamos.

 

¿Y tú has tenido ansiedad? ¿Qué haces para cuidarte? ¿Cómo la gestionas?

En Centro Óptima realizamos intervención individual y también intervención en formato grupal (son muy enriquecedoras) para aprender de la ansiedad y cómo hacer para mejorar la relación con ella y que se convierta en una herramienta de avance, conocimiento y mejora en nuestra vida. En Octubre iniciamos un grupo para trabajar la ansiedad con mindfulness. Si tras leer este artículo sientes que es para ti o para alguna persona que le pueda interesar y enriquecer, escríbeme un correo y cuéntame tu caso. Recibo tu historia con amabilidad y comprensión, te dejo mi email: vanessa@centrooptima.es

Te deseo tranquilidad, respira profundamente y sigamos disfrutando de los regalos que nos da la vida.

Vanesa Gómez Fernández – Psicóloga, Sexóloga, Logopeda y Especialista en Mindfulness en la Práctica Clínica